"La imaginación al poder"

martes, 2 de noviembre de 2010

Ancas de bebé

Cuchillito, cuchillito necesitas filo, cuchillito cuchillito esa hoja hay que modelar.  Ayuda a esta jorobadita a poner contenta a mamá. De atrás para adelante, de un lado a otro, ya brillás cuchillito, ya estás listo para empezar.¿ Que tal hermanito?  Hoy vamos a cocinar, vos ayúdame y estate quietito que esta jorobadita va a trabajar. Cuchillito, cuchillito ayudame, despacito esa carne hay que cortar, cuchillito ese piecito del cuerpo hay que separar. De adelante para atrás, ya tu hoja no veo entre las carnes que has de cortar. Hermanito hermanito estate quietito que la sangre en el piso no he de derramar, y silencio por favor hermanito querido, no llores más, que la abuela duerme y la vas a despertar.  Estos picarones hay que sacar, uña por uña se van a separar, con cuidado para no desperdiciar, cada trozo de piel que pegada quedará. Y raspa, raspa cuchillito, raspa las pezuñas, que los restos no caigan, no hay que malgastar. Éste dedito compró un huevito, éste dedito lo cocinó, éste dedito peló la cáscara, éste dedito le puso la sal  y éste pícaro gordito se lo comió. Ya no llores querido mío, solo falta uno para terminar. Te prometo que tus pies no vas a extrañar, de todos modos tú no caminas, no los necesitás. Hay que poner feliz a mamá para que a esta jorobadita vuelva a besar. Calla hermanito, calla ya, si no esa lengua he de arrancar. Recuerda que mamá repite y repite que ese pie desea almorzar. “Que rico piecito, me como ese piecito” ella dice mientras degusta ese manjar, solo que creo que un caldo y unas papas no le quedarían mal.   Guarda tus lágrimas, piensa en los demás, y en la gran sorpresa que recibirán. Ya queda solo un poco, ese tendón pronto cederá y  este trapo sucio la sangre limpiará. Se me abre el apetito de tan solo pensar en cómo este plato finalmente quedará. ¿Oyes eso hermanito? Es el auto de papá,  de la función de teatro salieron ya. El cerrojo se abre querido mío, los pasos se acercan cada vez más. ¿Por qué lloras mamá? ¿Por qué gritas papá? Estos piecitos que deseaban masticar, esta jorobadita acaba de preparar, con ayuda de hermanito claro está. ¿Por qué no me besan? ¿Por qué no me abrazan? ¿Acaso saben mal?


*Dedicado a Manu y a Eric Cartman

6 comentarios:

  1. Espero que no estemos hablando de los piecitos de la que vos ya sabés, después te cuento por que te lo digo.
    El cuentito como siempre muy dulce, digno de la mejor cultura del cinismo familiar.

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  2. jaja! Me encantó la mezcla (la paradoja casi) entre lo siniestro de la anécdota y el tono pueril del discurso. Muy digno de South Park!

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  3. Es como si en todo momento estuvieras intentando superar tu nivel de perversidad!!
    Me agrada que me hayas dedicado este dulce dulce cuento.

    Igual, excelente!

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  4. Totalmente, cartman cuando cocino a los padres de no me acuerdo quién...
    me sonó a esos juegos de palabras que teníamos en la primaria, onda "un tallarín, un tallarín, que se mueve por aquí, que se mueve por allá"
    gracias por remontarme a la infancia con este noble cuento.
    Hace 5 horas · Me gusta · 1 persona

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  5. Y yo recordé esta canción de mi infancia:

    "Un bichito colorado
    mató a su mujer
    con un cuchillito
    de puntalfiler
    le sacó las tripas
    se puso a vender
    a veinte a veinte
    las tripas calientes
    de mi mujer..."

    ¿No es delicioso? ¿Será que la infancia no entiende de paradojas y oposiciones?

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  6. una bestia!!! una asesina, graciosa e insuperable bestia!!! muy bueno, che!!! ya veo qué haré cuando obtenga el título... jejeje

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